lunes, 10 de mayo de 2010

Carancho: una película, una realidad

La nueva película de Pablo Trapero, protagonizada por su pareja, Martina Gusmán (Luján) y Ricardo Darín (Sosa), muestra una realidad lejana a la vida cotidiana del común de la gente, pero muy cerca a la realidad del país.


“Carancho”, es un ave de rapiña, pero en este caso, se le da otro significado: un abogado que se dedica a buscar víctimas de accidentes de tránsito para que inicien demandas judiciales contra las aseguradoras, y quedarse con gran parte del porcentaje obtenido.
Darín, interpreta a este abogado, que está a punto de recuperar su licencia y que, por necesidad económica, tiene que seguir trabajando para la fundación que “ayuda” a los damnificados. Un día como todos los demás, en que Sosa está en camino a un accidente de tránsito conoce a Luján, una joven médica que reparte su tiempo, arriba de la ambulancia y haciendo guardias en el hospital.





Claro está que varios espectadores de “El secreto de sus ojos”, esperaban de “Carancho”, una película adorable, una historia de amor y a un Darín encantador. Lejos de eso, el film de Trapero tiene suspenso, escenas impresionables y no recomendadas para gente sensible, violencia. Por momentos Sosa, el personaje de Darín, genera una gran contradicción. Todos saben que no hace las cosas bien, que estafa a la gente, pero al mismo tiempo es un buen tipo, que busca enamorarse, conquistar a Luján y dejar la vida que tiene.

Trapero logra sumergir al espectador en estos estilos de vida tan particulares. La de Luján que dedica su vida al trabajo, a salvar vidas y a dar lo mejor de sí, aunque no sea perfecta y sea parecida en muchos aspectos a Sosa, a quien ella en un principio critica y mira con desprecio por ser un “carancho”. Ambos muestran su lado más vulnerable, en diferentes tiempos y de distintas maneras, más o menos explícito.

El paralelismo entre la ficción y la realidad, fue el catalizador que llevó a Trapero a hacer esta película: la gran cantidad de muertes por accidentes de tránsito en el país.

Las cifras son altísimas, según la Asociación Civil, Luchemos por la Vida: 22 personas mueren por día; hay 7.885 víctimas fatales por año. En Argentina los accidentes de tránsito son la primer causa de muerte, y comparados con otros países desarrollados, llegó a haber al menos 8 o 10 veces más víctimas fatales. En la provincia de Buenos Aires, el número de muertes en un año es abismal: 3195, mientras que la provincia que le sigue es Santa Fe con 698 victimas.

Quizás una película sirva de reflexión para cambiar la mentalidad, tomar conciencia de que son demasiadas las muertes por accidentes viales, que el casco arriba de la moto y el cinturón de seguridad en el auto, no son en vano, y que cada uno en la calle tiene una responsabilidad: propia de cuidar su vida, y ajena de preservar la del otro.





Candela Martín, Daniela Ledesma.

1 comentario:

  1. El blog despego con todo! Las imágenes de los cactucitos son geniales. Me copa el mexicano..

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